jueves, 4 de agosto de 2016

De romances patriarcales y violencias de género


De romances patriarcales  y violencias de género 





 «El día que una mujer pueda no amar con su debilidad sino con su fuerza, no escapar de sí misma sino encontrarse, no humillarse sino afirmarse, ese día el amor será para ella, como para el hombre, fuente de vida y no un peligro mortal»


En el análisis que hacen algunas feministas confluyen tres elementos: el capitalismo, el patriarcado y la heteronorma o lo que algunas llaman el capitalismo-hetero-patriarcal el cual impone un modelo de amor, una forma de relacionarnos en pares que se reproducen y a su vez reproducen el sistema de desigualdad y opresión. En las sociedades occidentales este modelo de amor es posicionado como centro de aspiraciones en la vida de las mujeres.

En México son asesinadas 7 mujeres al día. Estas mujeres y jóvenes no fueron asesinadas por un desconocido o un psicópata como en ocasiones se dice en la prensa, fueron privadas de la vida por sus parejas o exparejas, sus novios, ese “príncipe azul” que les prometía amor eterno, esa persona que conocía sus sueños y aspiraciones.

Para algunas personas hay algo de romance en estas crueles escenas ¡como Romeo y Julieta! -se escucha en tono de suspiro-, para el resto la culpa es de las mujeres, “¿por qué no lo dejo si ya sabía cómo era?”, “Ella se lo busco”, “Es su culpa” “Te quiere por eso te cela” “No sabe cómo llamar tu atención” “Reacciona así, porque te quiere y no sabe cómo expresarlo” Pero la realidad es que para la mayoría de las mujeres el amor romántico se ha convertido en sinónimo de violencia, sufrimiento, denigración y muerte.

Y es que tenemos un serio problema con el amor y la violencia hacia las mujeres.

Como mujeres, a pesar de nuestra sensación de que “algo no anda bien”, interpretamos como  una demostración de “amor verdadero” actitudes de control y represión, convirtiendo incluso la celopatía en un termómetro de la intensidad del amor. En realidad son éstos  los primeros escalones para la construcción de una pareja asimétrica en la que el chico impone su criterio y la chica va siendo sometida poco a poco adentrándose en una espiral en la que a cada paso se añade un grado más de violencia. El amor romántico que se nos presenta mediante las películas, novelas, literatura, canciones como ideal a alcanzar impone un modelo de relacionarse desde la heteronorma y la desigualdad entre hombres y mujeres a través de mitos e ideales como los celos, la exclusividad, la creencia de que el amor verdadero perdona todo, el famoso “Si no se sufre no es amor”, “El amor es para siempre” y “La media naranja”.

La pervivencia de estos mitos ligan las relaciones afectivas con el control, los celos, los sacrificios extremos y el abandono del propio ser en manos del otro, originando una incapacidad de responder de forma temprana a las señales de una relación que puede convertirse en una relación violenta y destructiva. Sorprende que conceptos como el de respeto, igualdad, libertad, apoyo y ayuda mutua, no aparezcan en el primer lugar de las prioridades de una relación de pareja.

Es entonces que el entramado del amor romántico representa una herramienta de control que pone en riesgo la vida de las mujeres y perjudica profundamente la lucha por la igualdad de las mujeres y su autodeterminación. Es un amor basado en un modelo capitalista de posesión del otro(a) que reproduce los roles de género tradicionales y que se basa en el sufrimiento, sacrificio y entrega total de las mujeres.

Las feministas no sólo hemos cuestionado este modelo de amor, también en el día a día y a través de reflexiones colectivas hemos buscado otras formas de relacionarnos desde la autonomía, el goce, la libertad, el desapego.

Otras formas de amar son posibles y no hay una receta o un libro con 10 pasos para librarte del amor romántico, es un ejercicio cotidiano de deconstrucción constante de prácticas patriarcales para lo cual es importante desmontar  los mitos sobre el amor romántico, aquí se presentan algunos: 

Mito de la complementariedad o media naranja. Creer que es necesaria una pareja (la cual está predestinada) para ser completamente feliz en la vida.

Mito del razonamiento emocional. Creer que cuando una persona está enamorada de otra, es porque ha sido activada por esa persona una “química especial”.

Mito “sólo hay un amor verdadero en la vida”. Creer que si se deja pasar un amor, nunca se va a encontrar otro igual.

Mito de la perdurabilidad. Pensar que el amor romántico y pasional de los primeros meses de una relación puede y debe perdurar tras años de convivencia, el famoso “Te amaré para toda la vida”.

Mito del emparejamiento y conversión del amor de pareja en el centro y la referencia de la existencia personal“La entrega total”. Hace referencia al olvido de la propia vida, dependencia de la otra persona y adaptación a ella.

Mito de entender el amor como despersonalización.  Olvidar la propia identidad y sacrificar el yo.

Mito del matrimonio. Creencia de que el amor romántico y pasional debe conducir a la unión estable, exclusiva y monogámica.

Mito de los celos como muestra de amor. Se plantean los celos como una forma de expresar sentimientos positivos hacia la otra persona. No se cuestiona el papel de posesión y el inicio del espiral o círculos de violencia hacia la pareja.

Mito sexista de la fidelidad y de la exclusividad con diferentes juicios para hombres y mujeres sobre la propiedad de una persona sobre otra a través de la relación.


El amor romántico como lo definimos algunas feministas es una construcción social y por tanto puede deconstruirse, podemos desmontar los mitos del amor romántico y construir otras formas de relacionarnos, ser libres, sin jerarquías, posesión y violencia. No es una tarea fácil -cabe decirlo- pero es importante dar esa lucha. Necesitamos despatriarcalizar el amor, romper con las estructuras de opresión porque la lucha contra el sistema también implica luchar contra las dinámicas de su interiorización y su reproducción  en nuestros cuerpos y emociones. 




Equipo Elige
Elige, Red de Jóvenes por los Derechos Sexuales y Reproductivos 
@EligeRed



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¿Tienes algo que comentar?